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Retomo las minicríticas con Los ojos de Julia, Wall Street 2, Gru. Mi villano favorito y The last seven. ¡Empezamos!

Los ojos de Julia

Los thrillers modernos suelen caer en un formulismo que les lleva a ser totalmente predecibles y éste no es una excepción. La diferencia radica en la impresionante dirección de Guillem Morales, que consigue sumergirte de lleno en ese universo de oscuridad; y en la impecable interpretación de Belén Rueda. Bebe mucho de Hitchcock y recuerda a escenas clásicas como la visión nocturna de El Silencio de los Corderos, pero sobre todo del giallo, de Bava y Argento. La tensión está garantizada.

Wall Street 2

Uno de los grandes peligros de las secuelas es destrozar algo que era perfecto o que de alguna manera se había mitificado. La vuelta de Gekko, ese tiburón sin escrúpulos de Wall Street, al terreno de juego ha provocado justo eso. No solamente a la película le falta energía, ritmo e ingenio, los principales ingredientes de la primera entrega, sino que le falta Gekko. Rápida, descuidada, oportunista y facilona. Nunca llegas a estar dentro de la película.

Gru. Mi villano favorito.

El listón en el cine de animación lo fija Pixar, y lo ha situado bien alto. Aunque no llega a este nivel, Gru combina de forma inteligente un diseño gráfico impactante y una comedia muy bien elaborada. Proporciona evasión y carcajadas, aunque es todo demasiado infantil para mi gusto.

The last seven

Película que pasó totalmente inadvertida pero que cautivó mi atención gracias a su cartel. Se trata de un thriller apocalíptico, de esos que me encantan, donde siete personas se despiertan en un Londres totalmente desierto. Su objetivo será averiguar qué ha pasado. Aunque posee algunos momentos de terror muy efectivos, el resultado final es pobre, desembocando en un final comodín prohibido por los cánones del buen guionista.